Sonora ordena a sus policías matar a ladrones armados con machetes
Esta medida ha contado con aceptación ante el hartazgo por el incremento de la violencia
El Gobierno de Sonora ha dado luz verde a sus policías para matar. Ante el incremento en la inseguridad, el fiscal del Estado, Rodolfo Montes de Oca, dio la orden a los agentes para que disparen contra presuntos delincuentes armados con machetes cuando estos desenfunden el arma. “Deben de saber los delincuentes que estén portando armas prohibidas, que estén circulando por las vías públicas y sean inspeccionados por nuestros elementos, que al más mínimo amago o [cuando] desenfunden esas armas prohibidas nuestros elementos van a reaccionar con sus armas de cargo en legítima defensa, y lo más probable que va a suceder es que van a ser abatidos”, dijo en una entrevista a un medio local.
En los últimos meses han aparecido hombres armados con machetes que asaltan tanto en colonias de las periferias como en el centro de Hermosillo, la capital del Estado fronterizo con Estados Unidos. Uno de los casos que desbordó el hartazgo social fue el ataque a un enfermero que trabajaba en un hospital en la capital. Martín, así se llamaba, fue herido con un machete el 3 de mayo por seis adolescentes que le pidieron dinero al salir de una tienda de autoservicio. El hombre dijo a medios locales que había presentado una denuncia. Estaba indignado y temeroso por lo sucedido. “Que las autoridades hagan algo porque los policías ni siquiera los buscaron”, pidió en una entrevista de radio. Once días después, Martín fue nuevamente atacado y asesinado. Los vecinos encontraron su cuerpo cerca de su casa con una herida en la yugular.
En menos de quince días, cuatro hombres que portaban machetes fueron asesinados. En los comunicados de la Fiscalía se explica que en todos los casos se les intentó detener, pero opusieron resistencia, por lo que los policías recurrieron a dispararles. El caso más reciente ocurrió el pasado jueves cuando las autoridades estatales informaron sobre el “abatimiento” de un hombre al que calificaron como líder de una banda de macheteros. "Se abalanzó contra los agentes portando un machete con la que trató de agredirlos, los oficiales utilizaron comandos verbales para neutralizarlo, pero hizo caso omiso y los atacó, en defensa se usó la fuerza letal”, se lee en un comunicado enviado por el Gobierno.
El Gobierno de Sonora encabezado por Claudia Pavlovich (PRI) se escuda en el artículo 13 del Código Penal de Estado, que deja sin efecto la comisión de un delito cuando se trata de legítima defensa. Según la norma: “cuando se repele una agresión real, actual o inminente y sin derecho, en defensa de bienes jurídicos propios o ajenos, siempre que exista necesidad de la defensa empleada y no medie provocación dolosa suficiente e inmediata por parte del agredido o de su defensor”, se considera legítima defensa. Esta disposición ambigua utilizada por el funcionario público ha dado luz verde a los agentes para que ataquen.
Con información de El País.